Si uno trata de mantenerse al margen (sobre todo porque eso de hablar de todo acaba siendo un poco pesado) pero en un año como este en donde hay elecciones en el país en el que vivo (y en el país que decide cómo viven o deben vivir en el resto), es difícil mantenerse «neutral» y callado. Total que hasta abrí una categoría de «politiquerías» (la semejanza fonética con porquerías es mera coincidencia, ¿o no?), porque sé que no podré aguantar sin apuntar una cosa o dos (y que conste que he resistido varias veces el decir algo sobre mis mañanas y las dósis de la COPE a las que mi compañero de piso le gusta someterme). Total que la primera cosa que quiero comentar es este anuncio que puebla todos los metros de la ciudad:
«La gente no se va de su país por ganas sino por hambre. Pero en Cataluña no cabemos todos«
El nombre del tipo y el partido, no es que den igual, pero me dan igual a mi (total, yo ni ciudadano soy, por lo tanto no voto). Sin embargo, vivo aquí, pago impuestos aquí y mi hogar, al menos por ahora, está aquí. Ya verle la cara al compa este es bastante desagradable como para además tener que leer estos eslógans (que demuestran que los políticos sólo quieren votos, no entender al mundo y ayudar en él). Pensando en lo difícil que resulta querer hacer de este un hogar cuando en el metro te dicen que «aquí no cabemos todos» (y que conste que yo paso hambre aquí, no en México), recordé a otro catalán, uno que me gusta mucho y que en una canción preciosa dice: «El meu país és tan petit que sempre cap dintre del cor si és que la vida et porta lluny d’aquí» (Mi país es tan pequeño que siempre cabe dentro del corazón si es que la vida te trae lejos de aquí) y en otra más apunta: «Jo hi sóc perquè tu vols ser-hi,sinó res no em lliga aquí,que sense tu no sé entendre, cap demà ni cap país» (Yo estoy (o soy) porque tu quieres estar aquí (o ahi), si no nada me ata aquí, que sin ti no sé entender, ningún mañana ni ningún país) y me cambió el humor. Como siempre, ante las miradas cortas, no hay nada como una dosis de poesía, y en lugar de ver al político ese, quedem-nos amb lluís llach que fa que viure en aquest petit país sigui un honor.